Encanto mágico hay en tus ojos, dulce claridad diáfana,
Que ilumina mis sentidos y enciende mis pasiones,
Avecilla de colores primaverales que vate sus alas
En el huracán de nuestros suspiros,
Fulgor radiante es tu sonrisa, y tus cabellos hilos de plata
Y oro que seducen a mis ojos, y descontrolan mis emociones.
Dulce estrella palpitante en el oscuro horizonte son tus pupilas
Y tus labios, rojos pétalos de seducción.
La mujer perfecta eres tú, la musa que destella luz,
Mi princesa vestida de azul,
Perlas blancas hay en tu boca y una risa candente que me provoca
Suave y delicada eres tú como un suspiro, mariposa de cristal
Eres el verso que emerge de mi alma, la llama que hierve en mi sangre
Y Los fuertes latidos que da mi enamorado corazón.
Brisa fresca son tus lagrimas, calidas estrellas fugases
Piel se seda tienes tu, manos frágiles que recorren
Mi cuerpo en el crepúsculo como la brisa
Que besa mí cuerpo a cada instante.
Como el fuerte deseo que me infunde
Tu sincero amor.
Reo soy de tus ojos, de tu boca, de tu piel
De tus manos y caricias. Reo de tus labios,
Prisionero de tu amor y esclavo de cuerpo
De tu olor y tu fragancia… prisionero seré
De tu amor hasta que tenga que partir
Prisionero de tu amor, hasta que mi corazón deje de latir
Autor. Carlos cueva zamalloa.Seudónimo: José Carlos mistral
